BRUSELAS.- La falta de voluntad política de las autoridades mexicanas para resolver los cientos de feminicidios en Ciudad Juárez, Chihuahua, así como las desapariciones de mujeres y niñas en esa entidad, llevó al eurodiputado Raúl Romeva a concluir que la situación está cada vez peor.
(Artículo publicado el 2 de Diciembre de 2009 en la sección Prisma Internacional de la Agencia PROCESO)
El legislador español participó el jueves 19 de noviembre en una conferencia organizada por el Grupo de los Verdes y la representación de la Fundación alemana Heinrich Böll ante la Unión Europea (UE) en la sede del Parlamento Europeo.
A ese encuentro sobre feminicidios en México y Centroamérica, el segundo que se realiza en esta ciudad en los últimos dos años –el primero fue en septiembre de 2007–, asistieron integrantes de organizaciones como Amnistía Internacional, la Coordinadora Alemana por los Derechos Humanos en México y el Comité Latinoamericano y del Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem).
La conferencia del jueves 19 tuvo como finalidad evaluar los avances en las recomendaciones que el Parlamento Europeo presentó el 20 de septiembre de 2007 al gobierno mexicano y a la Comisión Europea para atacar los feminicidios en México y Centroamérica.
Y Romeva aprovechó el foro para lanzarse contra la administración calderonista, a la que no sólo acusó de “mostrar un completo desinterés a pesar de las condenas y cuestionamientos internacionales, sino también de agravar la situación de desprecio por los derechos de las mujeres con el nombramiento de Arturo Chávez Chávez como procurador general de la República”.
La abogada mexicana Andrea Medina Rosas, integrante de la Cladem, también criticó “la política de simulación” de las autoridades y expuso que activistas sociales y miembros de organizaciones civiles como Nuestras Hijas de Regreso a Casa, de Ciudad Juárez, han recibido amenazas, por lo que algunos han pedido asilo político en países como España.
“México se excusa por no tener suficiente capacidad para investigar, detener y sancionar a quienes son responsables de las desapariciones y homicidios de mujeres desde hace 16 años, y desde entonces pide ayuda financiera para fortalecer su policía y cuerpos de seguridad pública para lograrlo”, dijo la activista.
Y continuó: “La simulación consiste en decir que, después de recibir los apoyos, sigue sin tener la capacidad para prevenir y atender el feminicidio en Ciudad Juárez. En realidad la cooperación ha fortalecido la Policía Federal de manera muy efectiva, pero para reprimir y criminalizar a los movimientos sociales, tan sólo recordemos los casos de San Salvador Atenco, en el Estado de México, y Oaxaca, donde las mujeres que se manifestaban hace dos años fueron torturadas y violentadas sexualmente por la policía.”
La representante del Cladem relató también que entre 2004 y 2005 el gobierno mexicano realizó una serie de eventos y publicaciones para armonizar la legislación en México en relación a los derechos humanos de las mujeres, entre ellos el aborto.
Sin embargo, dijo, en últimos meses 24 estados pusieron a debate sus constituciones para poner los derechos del niño no nacido sobre los derechos de la mujer. “Hoy, 17 aprobaron esa iniciativa”, expuso ante el auditorio del Parlamento Europeo que congregó a 70 personas, entre ellas Alejandro Sousa, responsable de temas de derechos humanos en la legación mexicana ante la UE, y Alberto Glender, encargado de las relaciones con el Parlamento Europeo.
Durante el debate, el primero en pedir la palabra fue Sousa. El funcionario calderonista declaró que “compartía varias de las consideraciones” expresadas por Medina Rosas, e incluso enlistó las “acciones positivas” de los gobiernos federal y del estado de Chihuahua, así como de los congresos de la Unión y los de los estados.
Según él, las autoridades mexicanas han invertido 670 millones de dólares en proyectos de apoyo a las mujeres y en programas de equidad de género, por lo que consideró como “una contradicción” cuestionar al gobierno de México y al mismo tiempo apelar al él para prevenir y castigar los feminicidios.
CRÍTICA EUROPEA
La mayor parte de las recomendaciones del Parlamento Europeo se dirigen a la Comisión Europea, que rige las relaciones de la UE con México y monitorea el cumplimiento de la cláusula democrática contenida en el acuerdo bilateral que entró en vigor el 1 de octubre de 2000.
Además, el documento le solicitó a esa instancia, y a los países miembros de la UE con embajadas en México, crear un programa de intercambio y cooperación en materia de lucha contra la violencia de género, llevar a cabo proyectos de asistencia, apoyar la creación de sistemas de protección eficaces para los testigos, las víctimas y sus familias o implementar un nuevo programa de derechos humanos.
Davide Zaru, oficial de la Dirección de Derechos y Democratización de la Comisión Europea, explicó que los esfuerzos de esa institución en la materia estaban plasmados en las Directrices de la UE sobre la violencia contra las mujeres y la lucha contra todas las formas de discriminación contra ellas, adoptadas el 1 de diciembre de 2008, que se aplican a todos los países con los que la UE mantiene relaciones de cooperación.
En junio pasado la delegación de la Comisión Europea en la Ciudad de México entregó a Bruselas un reporte de la situación de las mujeres en el país que actualmente está siendo analizado.
Meses antes, el 28 de noviembre de 2008, el Consejo de la UE, conformado por los países asociados, anunció que emprendería un diálogo sobre los derechos humanos con las autoridades mexicanas. Durante la conferencia el jueves 19, Zaru adelantó que el encuentro se iniciaría el viernes 27.
Sin embargo, Romeva considera que la Comisión Europea aún tiene mucho qué hacer en el caso mexicano, y lamentó la falta de apertura que mostró la comisaria de Exteriores de esa instancia, Benita Ferrero-Waldner, para abordar el asunto con él.
El eurodiputado cuenta solicitó un encuentro con Ferrero-Waldner para discutir los avances en la materia de 2008 a la fecha, “pero ella nunca pudo recibirme: siempre alegaba que tenía problemas de agenda”.