BRUSELAS (apro).- El pasado 21 de abril, en el marco de una gira de trabajo en las instituciones de la Unión Europea (UE), el secretario mexicano de Relaciones Exteriores, José Antonio Meade Kuribreña, ofreció una charla para Friends of Europe.
*Este reportaje se publico el 24 de abril de 2015 en la sección Prisma Internacional de la Agencia PROCESO. Aquí puedes leer el texto original▷
Tal organización, con sede en la capital belga, se presenta en su página de Internet como un “think tank independiente” que “estimula el pensamiento sobre temas globales y europeos claves” y que “promociona la confrontación de ideas”.
“Friends of Europe se promociona como el proveedor de un espacio neutral para el debate, pero ni por un segundo es así: primero, porque esa organización está sobradamente financiada por grandes compañías del sector privado y, segundo, porque los eventos que organiza son desequilibrados”, afirma en entrevista con Apro el corresponsal irlandés David Cronin, autor del libro Europe Corporate (Europa Empresarial), publicado en 2013.
Cronin –cuyos trabajos periodísticos han sido publicados por diarios como Guardian o Wall Street Journal Europe– asegura que los invitados y oradores en los eventos de Friends of Europe “dicen lo que piensan los grandes corporativos”.
El presidente de dicha organización es el político y millonario belga Etienne Davignon, quien fue vicepresidente de la Comisión Europea y presidente de la Agencia Internacional de la Energía; la mayor parte de los miembros de su Consejo ocuparon altos cargos en las instituciones de la UE y en las cuales conservan influencia.
De acuerdo con la organización británica Spinwatch, entre las numerosas compañías que financian las actividades de Friends of Europe se encuentran las petroleras BP, ExxonMobil y Shell, o empresas como Coca-Cola, Telefónica, Unilever, Microsoft o las farmacéuticas Novartis y Pfizer.
Cronin relata que en 2012 asistió a un evento de la organización Security and Defense Agenda (SDA), que también pertenece al grupo de Friends of Europe y que fue fundada por el mismo personaje, Giles Merritt. Entre los oradores estaba Chad Fulgham, del fabricante estadunidense de armamento Lockheed Martin, a quien Cronin le preguntó si estaba orgulloso del papel de su compañía al armar a Israel, que ilegalmente ocupaba territorio palestino.
“Hubo un gran silencio en la sala. Es evidente que en sus eventos hay ciertas preguntas que no se pueden hacer”. Merritt, el moderador, desechó la pregunta de Cronin por estimarla irrelevante.
Diálogo edulcorado
Durante la presentación de Meade no se abordaron asuntos incómodos para el gobierno mexicano. Lo anterior a pesar de que México enfrenta problemas económicos y una profunda crisis en materia de seguridad, derechos humanos y de imagen en el extranjero, ahondada por el caso Ayotzinapa, además de los recientes escándalos de corrupción y conflicto de intereses del presidente Enrique Peña Nieto y su gabinete y que reportó ampliamente la prensa extranjera.
Bajo el título de México: un ascendente socio estratégico de la UE, Friends of Europe anunció así la conversación con el secretario: “En tanto que potencia global en manufactura, con un producto interno bruto de 1.3 trillones de dólares y un floreciente mercado interno, México ha emergido como un actor regional y global clave. Desde 2008, también es uno de los socios estratégicos de la UE”.
La publicidad del evento prosigue: “Una serie de reformas audaces en áreas tales como el mercado laboral, la educación, las telecomunicaciones, la política de competencia y la energía, así como el impulso anticorrupción del presidente Peña Nieto, han añadido a los méritos de México el de ser una moderna democracia con una economía vibrante y competitiva”.
Y cierra preguntándose: “¿Están las empresas europeas buscando en México oportunidades de inversión en energía, infraestructura de transporte, y en los sectores aeroespacial, digital y de telecomunicaciones? ¿Cómo pueden México y la UE fortalecer sus relaciones comerciales? ¿México está haciendo lo suficiente para garantizar un crecimiento sostenible e integrador, así como para afrontar sus brechas de productividad y habilidades? ¿Pueden México y la UE desempeñar un papel conjunto significativo en la gobernanza global?”
Ante un público compuesto por unas 120 personas –en su mayoría autoridades europeas y latinoamericanas, cabilderos y académicos–, Meade sostuvo durante una hora una conversación tan a modo que se dio el gusto de soltar comentarios chuscos que fueron ampliamente celebrados.
Por ejemplo, cuando un asistente planteó los diferentes intereses geoeconómicos entre Brasil y México, Meade explicó que en realidad había una fuerte interrelación entre ambas naciones, y expuso como muestra que los brasileños consumen muchos productos y servicios de origen mexicano: pan de marca Bimbo, electrodomésticos Mabe, vehículos, botellas de Coca-Cola hechas por FEMSA, salas Cinépolis, y servicios financieros de Banco Azteca o de Elektra. “Y si no fuera suficiente, el antídoto para el veneno del escorpión es producido por una firma mexicana”, remató el secretario, desatando las risas y los aplausos de los presentes.
Cabildero o periodista
El secretario general y fundador de Friends of Europe, Giles Merritt, fue periodista de 1968 a 1983 del diario británico Financial Times; primero trabajó en Londres y luego fue el corresponsal en París, Dublín, Belfast y finalmente en Bruselas.
A mediados de los ochenta Merritt concibió y presidió una serie de seminarios sobre políticas de negocios que impartió el Centre for European Policy Studies, un conocido think tank con sede en la capital belga.
Posteriormente, en 1989, Merritt fundó Forum Europe, una organización con registro y sede en Reino Unido, cuyo actual presidente es el consultor privado Paul Adamson. El organismo se anuncia en su página de Internet como “el proveedor líder en la UE de conferencias y eventos”, en las que se debaten “directivas y legislaciones clave que emanan de las instituciones de la UE”. Merritt conserva el puesto de consejero senior.
Forum Europe reconoce que la mitad de sus eventos se realiza “a petición de un socio para poner un tema particular de la UE en el punto de mira”. Esos socios –o “patrocinadores”, como también se les llama– provienen de todas partes del mundo y son “gobiernos nacionales, instituciones de la UE, empresas, asociaciones comerciales u organizaciones internacionales”. Sin dar más detalles en su sitio de Internet, la organización invita a cualquier cliente a discutir en privado “modelos adicionales” de asociación para sus eventos, “incluyendo oportunidades de generación de ingresos”.
Después de crear Forum Europe, Merritt dio un gran salto en su carrera al convertirse en director del Philip Morris Institute for Public Policy Research (PMI, por sus siglas abreviadas). Esa organización –que operaba con recursos de esa tabacalera trasnacional– se presentaba públicamente en aquella época como un instituto “sin fines de lucro que se planteó el objetivo de promover, a través de documentos de reflexión, el debate sobre las principales cuestiones políticas a las que Europa se encuentra confrontada”.
Fundada en mayo de 1993 en Bruselas, PMI reconoce que fue creada “para traducir la voluntad de Philip Morris Companies Inc., uno de los líderes mundiales en los sectores de la alimentación, el tabaco y las bebidas, de participar en la reflexión sobre las políticas europeas”. Refería que sus publicaciones se enviaban –en inglés, francés y alemán– “a más de 10 mil políticos, altos funcionarios, periodistas, jefes de empresa y otros atentos observadores de la vida política”.
Merrit, señala el citado Cronin, utilizó la influencia de PMI para crear Friends of Europe y luego, en 2003, SDA.
“Merritt clama que es periodista, pero desde hace años que es verdaderamente un cabildero”, refiere el periodista irlandés.
En ello coinciden varias organizaciones no gubernamentales europeas que exigen transparencia y un control más estricto sobre las actividades de cabildeo en la UE, como lo hace Corporate Europe Observatory. Esta influyente ONG, con base en Bruselas, describe a Friends of Europe como “simples proveedores de servicios (de lobby y relaciones públicas) para sus ricas empresas asociadas, ofreciéndoles una plataforma para influenciar la toma de decisiones en la UE”.
En 2009 Merritt fue designado por el Financial Times uno de los 30 personajes más influyentes en Bruselas.
Sin riesgos
Meade respondió preguntas en torno a la relación mexicana con la región Asia-Pacífico; a la relación comercial y económica con la UE y la modernización en curso del acuerdo bilateral; a la cooperación científica y educativa del mismo; a la integración de América Latina y las perspectivas de la cumbre con la UE que se llevará a cabo en junio próximo en Bruselas.
Los asistentes también solicitaron su opinión sobre la situación en Venezuela, el proceso de paz en Colombia y la nueva relación entre los gobiernos de La Habana y Washington.
Se planteó igualmente el tema migratorio, pero como un campo en el que México tenía experiencia qué ofrecer y sin entrar en cuestionamientos a las graves violaciones a los derechos humanos que son cometidas contra los migrantes en México y que organismos nacionales e internacionales han denunciado. Meade incluso se dio el lujo de promover ante los europeos “el reconocimiento del derecho de vivir en las fronteras”, facilitando la movilidad de las personas por motivos familiares o de trabajo.
Sólo la última persona que pidió la palabra quiso saber cuál era el estado que guarda la cooperación entre México y la UE en materia de combate contra el crimen organizado. Meade respondió que había “muy buena coordinación con Estados miembros de la UE de los que México puede aprender, más que a nivel de la UE”. Explicó que, dado que el país “está moviéndose hacia un sistema de justicia oral”, ese proceso “se está fortaleciendo” con los conocimientos que brindan a las autoridades mexicanas la experiencia de la gendarmería francesa, las capacidades británicas de investigación, las técnicas de inteligencia contra el crimen organizado de los italianos y la cooperación en todos esos rubros con los españoles.
Tras esa respuesta, la directora de política de Friends of Europe, y moderadora del encuentro con Meade, Shada Islam, retomó la conversación en su temática comercial, preguntando al secretario cómo impactará a México la Asociación Trasatlántica para el Comercio y la Inversión, el acuerdo que actualmente negocia Estados Unidos y la UE.
“Es una buena noticia”, consideró Meade para finalizar el evento y continuar con sus citas: con el comisario europeo de la Unión Energética, Maros Sefcovic; la Alta Representante de la UE para Asuntos Exteriores y de Seguridad, Federica Mogherini, y con el comisario para Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici.