BRUSELAS (apro).- Con un monto de ventas de 5 millones de euros, Reino Unido –país que visitó el presidente Enrique Peña Nieto del 3 al 5 de marzo– se posicionó como el tercer país europeo que más provee a México de equipo militar.
Publicado el 9 de febrero pasado, el Reporte anual sobre control de exportación de equipo y tecnología militar de la Unión Europea (UE) del Consejo Europeo –correspondiente a transacciones de 2013–, indica que Reino Unido concedió ese año al gobierno mexicano 17 licencias de compra de armamento por un monto de 5 millones 58 mil 65 euros.
Tal cantidad equivale a casi 13.7% del total de las ventas de armamento a México por parte de países asociados a la UE, el cual se elevó a 36 millones 867 mil 191 euros. El gobierno de Londres fue así el tercer vendedor europeo más importante de armas para México, detrás de Italia (14 millones 428 mil 649 euros o 39% del total) y Francia (7 millones 314 mil 380 euros o 20% del total).
El monto de ventas italianas corresponde en su totalidad a ocho licencias en el rubro de armas de la categoría 1 de la Lista Común Militar de la UE: fusiles, armas cortas, ametralladoras y otros tipos de armas con cañón de ánima lisa con un calibre inferior a 20 milímetros, otras armas de fuego y armas automáticas con un calibre de 12.7 milímetros o inferior, y accesorios.
Es interesante observar que las autoridades mexicanas recibieron en 2013 equipamiento militar francés adquirido en años anteriores y que alcanzó un valor de 58 millones 604 mil 153 euros.
Además de Italia, Francia y Reino Unido, los otros países europeos que armaron a México ese año fueron Bélgica, República Checa, Alemania, Polonia, Portugal, Eslovaquia, España y Suecia.
El socio alemán
Alemania autorizó 10 licencias de compra de material militar por las que México pagó 3 millones 974 mil 784 euros, que colocó a los alemanes como el cuarto suministrador europeo de ese equipo.
En 2006 Alemania autorizó la exportación de 9 mil fusiles de asalto modelo G-36 de la empresa Heckler & Koch a México, los cuales terminaron en estados mexicanos a los que el gobierno de Berlín impuso un embargo de ese tipo de armas, entre ellos el estado de Guerrero.
Esa situación fue denunciada en 2010 por Jürgen Grässlin, dirigente de la organización no gubernamental alemana Oficina para la Información sobre Armamento, que acusó a la empresa de haber violado la ley federal sobre el control de armas de guerra. Actualmente, el caso es procesado en un tribunal de ese país, y se espera pronto un fallo.
El periodista del diario Die Tageszeitung, Wolf-Dieter Vogel, que ha seguido el tema desde el principio, ha revelado con fotografías y documentación que los fusiles alemanes eran portados por las fuerzas del orden que el 12 de diciembre de 2011 se ocuparon del desalojo con violencia de una manifestación de estudiantes de la normal de Ayotzinapa sobre la Autopista del Sol, que dejó un saldo de dos estudiantes asesinados por disparos. Esas armas también estaban a disposición del cuerpo de policía de Iguala, implicada en la desaparición de los 43 normalistas de la misma escuela.
De acuerdo con el mencionado reporte de exportación europea de equipo militar, una parte considerable de las ventas alemanas de 2013 a México (2 millones 516 mil euros), corresponden a la categoría número 10 de la Lista Común Militar de la UE. Ese apartado se refiere a “aeronaves, vehículos más ligeros que el aire, vehículos aéreos no tripulados, motores de aviación y equipos para aeronaves, equipos asociados y componentes, diseñados especialmente o modificados para uso militar”.
Otra clase de equipo alemán adquirido cuantiosamente por México fue el de la categoría 11, con un monto de un millón 223 mil euros.
El informe no precisa el tipo, pero se refiere a equipos electrónicos que interfieren señales y que son usados para perturbar el funcionamiento de los receptores adversarios, pero también incluye aquellos sistemas electrónicos de inteligencia militar y de seguridad de señales, así como equipos de monitoreo y vigilancia de procesamiento de datos.
Máximos históricos
A pesar de que en Alemania estalló desde 2010 el caso sobre la posible exportación de sus fusiles G-36 a estados de México bajo embargo, dos años después el país europeo vendió casi 7 millones de euros de material militar (a través de 23 licencias) al entonces gobierno de Felipe Calderón.
Ese año, 2012, se rompió la cifra récord de compra de armas europeas por parte de México, que alcanzó una suma de 448 millones 344 mil 895 euros. En 2010 el gobierno calderonista ya había comprado 355 millones de euros en equipo militar europeo, que marcó en su momento un máximo histórico. Esa cifra ya representaba más del doble de las compras que había efectuado Calderón Hinojosa al europeo de guerra el año anterior (2009) de 154 millones de euros.
En 2012, Francia fue el país más beneficiado de ese comercio, con ventas de 415 millones 483 mil euros, correspondiente a 92% del total que vendió la UE ese año a México. En su mayoría, 403 millones de euros, se trató de aeronaves, drones y equipo de aviación militar de la citada categoría 10 de la Lista Común Militar de la UE.
El gobierno panista pagó 7 millones 505 mil euros a los franceses por concepto de “tecnología” necesaria para el desarrollo, producción, funcionamiento, instalación, mantenimiento, reparación o revisión de los materiales de la Lista Común Militar de la UE. Asimismo, ese año los franceses exportaron equipo ya comprado años anteriores por un valor de 206 millones de euros.
Muy lejos quedaron Italia y Austria, que concretaron ventas por 7.5 y 7.6 millones de euros, respectivamente. Los franceses fueron los más favorecidos durante el sexenio de Calderón respecto de adquisición de armamento europeo.